Para los emprendedores un proyecto, o un emprendimiento es prácticamente como un hijo. Nos define como creadores, nos relaciona y nos responsabiliza.
Lo primero que hacemos es buscarle un «nombre» que, a diferencia de los hijos, tenemos que constatar (en la mayoría de los casos) que no esté registrado por otro y que esté disponible en internet y en redes sociales.
Luego debemos dotar al proyecto de identidad, además del nombre, para que no ande desnudo por la vida… la sociedad exige ciertas reglas de convivencia tanto para las personas como para los proyectos. Un producto sin un logotipo que refleje su identidad, es un producto desnudo… no solo de vestimenta, sino de gestos, de rasgos… Imaginemos personas sin rostro y sin ningún tipo de característica que los identifique más allá de sus acciones.
El logotipo es de vital importancia para un producto porque es la característica visual más importante de todas. Del logotipo decanta el resto de la imágen. El logo es al producto como el rostro a las personas. El resto de la imágen está asociada al logo, pero éste es lo más importante de todo.
A diferencia de los hijos, los emprendimientos son gestados a medida. El emprendedor hacer nacer una idea que luego es llevada a la realidad con acciones. Esa idea va creciendo y se va desarrollando en el mercado, para ello necesita de identidad, para ser reconocida, para ser sobre todo ELEGIDA por los consumidores.
Cada día aparecen más productos, más marcas, más nombres y más logotipos… todos mezclados en ofertas gráficas y digitales, atacando a los consumidores, seduciéndolos para ser el elegido entre tantos… Hoy más que nunca, el logotipo para a ser un estandarte de batalla, es la bandera en alto de una empresa que lo sostiene y que se ve reflejada en él, que quiere ser elegida, que exige (a través de la imágen) ser tenida en cuenta por los consumidores.
El logotipo es el resumen concentrado de la misión de la empresa y refleja, debe reflejar, todos sus valores y no solo debe identificarse con él todo un equipo de trabajo, sino que debe ser atractivo para las personas, para los consumidores que también se verán atraídos e identificados con él…
Cada logotipo transmite la personalidad de la idea, del producto… de la empresa. Crear un logotipo que identifique a nuestra empresa puede ser tan complejo como dibujar un rostro que transmita nuestros valores.
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